11/25/2009

Alumna, de nuevo.

Esta tarde ha sido como volver al pasado, porque he vuelto a la Escuela Oficial de Idiomas como alumna. Dejé de hacerlo hace unos diez años, aunque he seguido en contacto con la escuela gracias al grupo de teatro al que pertenezco y con el cual preparamos obras todos los años.
Durante los ensayos de este año, uno de los compis me comentó que se había apuntado a un curso de conversación en inglés... avanzado, por supuesto. Cuando salió de su primera clase, me comentó que todavía quedaba alguna plaza libre y me apunté. Y no es porque me guste estar en todas partes no, es que todo lo que tenga que ver con el inglés me gusta. Por lo tanto, me apunté. También el precio me animó a hacerlo la verdad. ¡20 euros!
No ha sido fácil para mí acudir a mi primera clase porque me da mucho corte todo lo nuevo, conocer gente nueva y encima hablar en público... pero lo he hecho.
Por lo visto, en la primera clase les habían mandado deberes. Les pidieron que prepararan temas de los que hablar en la segunda clase, como titulares de cosas que habían pasado en España en los últimos 50 años.
Nada más empezar, la profe ha preguntado: ¿Qué temas habeis preparado? --Silencio. Por lo visto no soy yo la única tímida que hay en clase...
Al final, uno de los chicos ha propueston hablar de ¡La muerte de Franco! ¡Toma ya!
¿Cómo ha podido retroceder tanto? Como no ha habido otra propuesta, la conversación se ha iniciado y casi todos han contado lo que estaban haciendo en aquel año. Que si una estaba en la escuela, otro acababa de empezar la universidad, otro en la mili...
Yo no he querido opinar, que enseguida empiezan a sacar cuentas y te dicen los años que tienes, y por ahí, no paso.
Cuando parecía que el tema no daba para más (más que nada porque el vocabulario en inglés entre los alumnos tampoco es muy extenso) la profesora ha vuelto a preguntar qué otros temas habían preparado. Silencio de nuevo, ¡que no habían hecho los deberes, oye!
Como de nuevo nadie proponía nada, la misma persona que había propuesto el tema de Franco, vuelve a la carga y propone hablar del intento del golpe de estado del 23 de febrero. Yo le miro y me pregunto ¿pero de qué catacumbas ha salido este tío?
Pues nada, a hablar otra vez del pasado y otra vez, las mismas preguntas: ¿Dónde estabas, o qué hacías tú en ese momento?...¡Y yo qué sé!
Sí lo sé pero de nuevo, no quería dar pistas.
La profe se ha debido de dar cuenta de que hasta ese momento yo había hablado poco y me ha preguntado directamente dónde estaba yo.
Algo he contado claro ¡qué remedio! Sentía la mirada de toda la clase en silencio esperando escuchar mi opinión y me he visto un poco acorralada, aunque eso si, muchas pistas de lo que estaba haciendo aquel año, no he dado. Ahora que, cuando coja un poco más de confianza con la profe y los compis, a mi que no me vengan con preguntas comprometidas porque yo enseguida digo:" Paso palabra". Bueno, lo diría en inglés: " Password". O no, porque password significa: "contraseña". ¡¡Uf!!
Lo importante es que me ha gustado volver a vivir mi experiencia como alumna. La profe nos ha pedido que para el próximo martes llevemos preparados algunos tópicos para hablar de ellos.
Algo pensaré, primero porque me gusta cumplir con mi obligación y segundo porque sino, me temo que quien propuso los temas de Franco y el golpe de estado, me puede volver a "sorprender" con algún tópico del tipo de "Cualquier tiempo pasado fué mejor" ...y la podemos tener.

11/17/2009

El lavavajillas.

En mi cocina como en las de casi todo el mundo, hay una serie de electrodomésticos que nos hacen la vida más agradable y sin los cuales ya nos sería muy difícil vivir.
Aunque algunos son actuales y otros han sido perfeccionados con el tiempo, toda mi vida he convivido con unos u otros y estoy familiarizada con todos. Eso hace que me sienta tranquila teniéndolos a mi alrededor ya que sé, o me puedo imaginar, cómo funcionan todos... ¿todos? ¡No! Hay uno por el que siento cierta desconfianza ya que no lo entiendo. Se trata del lavavajillas. No entiendo cómo hace su trabajo.
Cuando pongo la lavadora en marcha, puedo ver a través de la puerta de cristral, cómo el tambor se llena de agua y jabón, girando y moviendo la ropa para dejarla limpia. El microondas también tiene su correspondiente puerta de cristal por la que veo girar en su interior mi tazón de desayuno lleno de soja con cacao, que me bebo cuando finaliza el tiempo necesario para que esté caliente. Otro ejemplo es la vitrocerámica. Es fácil de entender que si se pone al rojo vivo, cualquier alimento que pongas encima, se cocinará.
La batidora de mano tiene una serie de aspas que mejor no pongas los dedos cerca porque te los corta rápido. Y ¿qué me dices del horno convencional? pues que también es posible ver a través de su puerta de cristal cómo se va haciendo la comida.
También es normal que si hierve el aceite de la freidora, las croquetas o las patatas se harán en pocos minutos. Pero...¿Y el lavavajillas?
Lo único que sé sobre él, es que meto todos los platos, los cubiertos, los vasos y algún que otro utensillo de cocina, cierro la puerta , que por cierto no tiene cristal y...ya no sé nada más.
¿Qué es lo que pasa en su interior? ¿La vajilla también gira como lo hace la ropa en el interior de la lavadora? ¿Por dónde sale el agua? y ¿quién abre el cajetín donde yo pongo la pastilla de jabón y que se cierra hermeticamente?
Mi imaginación me ha llevado a pensar que salen unos cuantos duendes y limpian la vajilla cuando yo cierro la puerta. Porque esa es otra, ¿qué pasaría si la abriera en mitad del proceso de lavado? ¿Se me inundaría la cocina? ¡Cuantas dudas me produce! Yo por si acaso, nunca la abro hasta que finaliza todo. Es el único electrodoméstico con el que no las tengo todas conmigo, sin embargo ahora...no sabes cómo lo hecho de menos.
Hace dos días decidió dejar de funcionar, quizá notaba mis recelos hacia él. Llevaba una semana haciendo mal su trabajo y un día dejó de tomarse la pastilla. Cuando le abría la puerta al final del programa, me la encontraba allí, enterita, sin disolverse.
Quizá no presté atención a las señales que me había estado enviando desde hace un par de semanas, anunciándome que tenía problemas.
Como cuando lo ponía en marcha y en lugar de estar media hora funcionando (como era lo habitual) se alargaba durante una hora y encima la vajilla salía como había entrado, es decir, sucia.
Yo creo que el agua salir salía, o si no me tenía muy bién engañada, porque el ruido era como si varios litros de agua se movieran por todo el tambor, pero como este electrodoméstico está herméticamente cerrado...
Cada vez que entro en mi cocina lo veo ahí, apagado y esperando que mañana venga el médico/técnico a ver qué le pasa. No sé, quizá sea ya demasiado tarde para recuperarlo, quizá ya esté un poco muerto.
Quizá ya es hora de empezar a pensar en sustituirlo por otro nuevo...no sé.

Bueno, he dejado pasar un par de días antes de finalizar este escrito, en espera del diagnóstico del técnico. Esta mañana ha venido y enseguida ha sabido qué le pasaba. Lo ha desarmado con una habilidad, que me he preguntado si luego sabría volver a colocar las piezas en su sitio o si le sobraría alguna. Al final le ha cambiado una pieza y me ha soplado 85 euros. Pero bueno, espero que haya merecido la pena pagarlos si eso me permite seguir disfrutando de él unos cuantos años más.
Le había cogido cariño, ¡que le vamos a hacer!

11/12/2009

Aquí un libro...aquí una amiga.


Esta tarde he hecho algo que no había hecho nunca (¿ves? ya no podré decirlo). Me han invitado a la presentación de un libro. He ido...y nos han presentado: "Aquí un libro, aquí Esther"
En el corazón de Rey Fernando de Aragón- barrio donde vivo- más conocido como Actur (¿qué nombre es este para un barrio? han abierto una segunda librería Cálamo.
La verdad es que no me había enterado de que la hubieran abierto. Lo siento pero no es el tipo de tiendas que visito con más frecuencia. Está situada muy estratégicamente, porque está cerca de la nueva Escuela de Artes y en unos años, muy cerca de allí construirán la nueva Escuela de Idiomas. ¡Anda que no saben los empresarios!
El libro presentado por todo lo alto, habla de los tres viajes que el autor ha hecho a Cuba. En él, podemos encontrar todas las anotaciones y dibujos que hizo mientras estuvo allí.
Lo chulo de esta presentación ha sido encontrar el libro-libreta original. Es decir, el que el autor llevó en sus viajes. Estaba en la librería para que la gente lo ojeara. A partir de hoy, el público en general que quiera saber todo lo que vivió y sintió en esos viajes, podrá hacerlo con los libros que ya se venden en las librerías y que son la copia del precioso libro original que tuve en mis manos.
La presentación ha sido toda una fiesta porque no se limitaba al encuentro en la librería, sino que incluía una cena para los más cercanos.
De 20 a 30 personas se esperaba que acudieran, y al finalizar... a terminar la noche en un bar de copas. Completo ¿no?
Pero yo no he ido. Después de haber sido presentados el libro y después de conocer su contenido me he despedido de algunos de los invitados y me he ido a... ¡mis clases de bailes latinos! Eso también ha sido genial.

¿Fotos? Siiiii...aquí.

11/08/2009

Conociendo a Mr. Arthur Brown.


¡Hala! Otro día que me sacan de mis casillas...perdón, otro día que me sacan de mi rutina.
Lo voy a aclarar.
Resulta que ayer viernes, cuando me estaba preparando para, como todos los viernes ir a ensayar la obra de teatro (rutina de viernes), va mi pareja y me sugiere ir esa noche a cenar con unos amigos y después reunirnos con Arthur Brown para tomar algo, y me dije...¡Qué demonios!. Tenía tantas ganas de conocerle...
Así es que, aunque tuve que mentalizarme y hacer algunos cambios en lo que ya tenía planeado, le dije que sí. Me costó, no creas. Pero es que estoy aprendiendo a no ser tan rígida.
Fué hace unos dos años cuando, escuchando a mi pareja hablar con sus amigos, supe quién era Arthur Brown. Me enteré de que era un artista que empezó a ser famoso en los años 60's.
Uno de sus éxitos más conocidos fué " Fire." Fué amigo de Jimmi Hendrix y participó en la película "Tomy".
Lo conocieron y en Santander, donde él actuó en un festival de música. Estos amigos habían ido allí de vacaciones y fueron a verle actuar.
A la mañana siguiente y mientras estaban desayunando en una terraza, lo vieron sentado en la mesa de al lado. Se acercaron a hablar con él y le invitaron a venir a Zaragoza. Y el caso es que lo hizo. Así empezó una "pequeña amistad" que le ha hecho volver en varias ocasiones y parece ser que va a seguir haciéndolo.
En este último viaje he tenido el placer de conocerle y no me ha sorprendido nada de lo que he visto porque ya me habían contado como era, y de verdad que no exageraban.
Es un gran tipo, divertido, hablador, cariñoso, simpático, lleno de energía...No paró de bailar en todo el tiempo que estuvo allí. No bebe, no fuma ... y tiene 69 años.
Con sueño y con pena, aunque feliz por haberle conocido, me retiré a las 3 de la madrugada. Allí se quedó él con el resto de amigos y seguró que los agotó a todos porque, según me han contado, tiene tanta energía que tienen que hacer un gran esfuerzo para llevárselo a la cama (a dormir, claro). Y todo eso, sín hablar español.
Sí, claro. Aquí están las demás fotos.

11/02/2009

Josita's party.


Recuerdo una canción de Antonio Flores que decía: "Puedo viajar, sin moverme del sofá"...y ahora lo entiendo porque es lo que yo hice anoche. Y no viajé sola. Lo hice como hay que hacer los viajes, acompañada de unos cuantos amigos y además de la manera más cómoda, sin equipaje y sin las largas esperas de los aeropuertos.
Fuimos llegando a casa de Josita, que era el punto de encuentro desde donde íbamos a partir, pero antes de hacerlo teníamos que tomar algo y la anfitriona nos preparó una estupenda cena, de la cual voy a destacar la crema de lentejas aderezada con comino que estaba buenísima. Era la primera vez que la probaba pero...no será la última.
La cena transcurrió muy animada, buén feeling y conversaciones divertidas y puedo asegurar que el vino no fué el "culpable" de ese buén rollito. Es verdad que las botellas fueron pasando por delante de mí una tras otra (incluído el champán) pero la risa fué natural. Os lo puedo asegurar yo, que solo bebí una lata de cerveza y sin alcohol. De hecho ni me la terminé, algo que sorprendió a la anfitriona, que no entendía que cuando nos íbamos, en mi vaso hubiera casi tanta cerveza como al empezar- bueno, yo también me lo pregunté-
Después del postre y el café, nos acurrucamos en el sofá para iniciar el viaje. ¿Destino? Israel.
La anfitriona estuvo allí el pasado septiembre y a través del ordenador conocimos más toda esa tierra. Incluso aprendimos un par de palabras ebreas. "Beseder", que significa "Vale" y "Jatula", que significa "Gata". Hala, ya me puedo defender si alguna vez voy allí.
Vimos fotos de preciosas montañas rocosas que forman el Valle de Timna y que evocan la historia de Jesucristo...la historia que nos han contado de Jesucristo. El desierto del Negev, Los Pilares de Salomón, la ciudad de Eilat, el Muro de las Lamentaciones, el horror del Museo del Holocausto...
¡Ah! y fotos de un hotel, el Red Rock Hotel y os preguntareis: ¿Qué tiene de especial este hotel? Pues así, como edificio no tenía gran interés, pero sí que encerraba muchos recuerdos, especialmente para uno nuestros amigos, que estuvo trabajando allí hace nada menos que ¡30 años! Por supuesto, se alegró mucho de volver a verlo. Por lo visto en todo ese tiempo apenas lo han renovado y el paso de los años le han dejado huella- y estoy hablando del hotel, ¿eh?-
Para endulzar el viaje se sirvió unos chupitos de licor y un poco de moscatel, junto con unas onzas de chocolate.
Al finalizar este viaje y sin movernos del sofá nos desplazamos a Manhattan, destino de otro de nuestros amigos que estuvo en septiembre también. Times Square, 5ª Avenida, La Grand Station, el Puente deBrookling, el Empire State Building y tantos y tantos rincones de una ciudad que es muy importante en mi vida. En la que he estado en dos ocasiones y a la que volvería otras tantas.
Los dos destinos son tan diferentes... Fué muy divertido.
De vuelta de estos dos destinos, los besos de despedida antes de regresar a casa, no sin antes quedar para volver a ver fotos de otro viaje. El que R. va a hacer a Uganda como invitado a la boda de un amigo. Nos adelantó algo de lo que puede pasar así es que ese viaje, seguro que tiene tela.

Sí, claro que hice fotos y están aquí.